Friday, June 12, 2009

ELLAS (HISTORIA POR ENTREGAS-2)


2-
Otro dia trabajando por dinero. Haciendo cosas que me aburren y/o aborrezco. Otro dia en que paso las horas en piloto automático,soñando subrepticiamente con tu cálida presencia, anhelando tus buenos momentos , que no son muchos. Otro dia soportando las flaquezas y debilidades de nuestro prójimo, buscando las cinco de la tarde a bordo del buque de la nostalgia perezoza. He perdido parte del corazón durante esta espera y no pocas neuronas también. A las dos me dió hambre y me puse a mirar tu foto, nuestra foto, mientras mordisqueaba la barra alimenticia con alto contenido proteínico. En esas estaba cuando sorprendí a mi jefe mirandome las piernas. El no se dió cuenta de que yo me dí cuenta,o, no se inmutó al menos.El pobre tal vez se hace ilusiones conmigo: No sabe lo engañado que está. Yo amo a una sola persona y esa eres tu , adorada Amanda. Amanda de mis dolores menstruales. Amanda de mis celos enfermizos. Amanda ebria y descontrolada. Bien se que al regresar a casa no habrás dejado ni siquiera el aroma de un hasta luego. Recogeré tu desorden, limpiaré tu porquería y lloraré tu ausencia. Después aguardaré a que vuelvas a dar señales de vida, que necesites dinero,que no tengas donde quedarte y.....te acogeré gozoza, me rendiré a tus caprichos e intentaré ser feliz por unos momentos.

Wednesday, June 10, 2009

ELLAS (HISTORIA POR ENTREGAS-1)


1-
La noche me sorprendió buscando la manera de llevarte al lecho. Insistías tercamente con un hablar enredado y trabajoso en que aún estaba muy temprano y era urgente seguir gozando de la vida; yo trataba de convencerte con paciencia y afectuosos modos. Entonces, haciendo gala del descaro desenfrenado del borracho, vomitaste a tu alrededor con una encomiable eficiencia. Eso te dejó exhausta y relajada. Dejaste de resistir.
Mientras te desvestía me detenía a pensar en cuanto me hubiera gustado hacerlo mientras estabas en sano juicio. Ahora, enlodada de porquería, te sentía repulsiva y anhelaba sumergirte en agua de azahares o cualquier otro desinfectante .
Luego de no poca lucha logré liberarte de la mentira de tu ropa. Exhalaste un largo suspiro y la fetidez de tu alcoholico aliento me produjo arcadas. Solo faltaba que transformaras en sólidas las pestilentes amenazas gaseosas venidas de tu esfínter menos grato, pero por alguna graciosa concesión de la providencia permaneció hermético y no pude menos que agradecerlo silenciosamente. Traje una toalla húmeda y limpié tu rostro con cuidado maternal. Entre dormida y despierta me hacías solicitudes impublicables y tus manos procaces trataban de pellizcar algo entre mis muslos .Por fin te rendiste y pude envolver tu juvenil encanto entre cobijas suaves y oscuridad total.
Mañana no vas a querer mirarme a la cara.No vas a querer enfrentar la responsabilidad de las ofensas proferidas, que, aunque esencialmente alcohólicas, expresan claramente tu desorden interno y el poco aprecio que me tienes.
Yo no sabré afrontar una mañana de resaca arrepentida y sedienta y por ello te dejaré sola en el desierto, con tu desnuda crudeza a cuestas y ansiando una mano piadosa que te bañe, te prepare confortantes caldos, amamante tu inestabilidad inconsecuente y te vaya reconciliando de a poquitos con la dura realidad donde se paga renta y las cosas tienen consecuencias.